Frutales enanos para cultivar en maceta
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Introducción
¿Te gustaría tener una cosecha de cerezas, duraznos y ciruelas en tu patio o terraza? Si es así, ¡tienes la opción de cultivar árboles frutales enanos! Estos árboles son perfectos para plantar en macetas grandes, igual que si estuvieras cultivando cítricos. Podrás disfrutar de sus flores en primavera y de sus deliciosos frutos en verano.
Una de las ventajas de los árboles frutales enanos es que tienen un porta injerto seleccionado que les permite adaptarse mejor a las macetas. Esto se debe a que producen menos raíces, crecen menos y no necesitan trasplantes frecuentes a macetas más grandes. Además, son más productivos y crecen más rápido. Tienen una copa compacta que no requiere recortarlos para mantener su forma. También son auto-fértiles, lo que significa que no necesitan otro árbol para la polinización.
Para cultivar nuestro árbol frutal enano necesitamos:
- Mezcla de sustrato, humus de lombriz y fibra de coco.
- Una maceta de un tamaño considerable.
- Piedras tendrá un buen drenaje.
- Regadera.
¿Qué es un frutal enano?
los árboles frutales enanos, una excelente opción para aquellos que buscan cultivar frutas en espacios pequeños como patios y terrazas. Los árboles frutales enanos no solo tienen un valor ornamental debido a su floración abundante en primavera, sino que también producen frutos comestibles de tamaño normal.
Los árboles frutales enanos son ideales para aquellos que desean cultivar árboles frutales en espacios reducidos, ya que su vida útil es excelente y no necesitan un gran espacio para crecer. Todo lo que necesitan es una buena capa de drenaje en la parte inferior y un lugar soleado.
Además, los árboles frutales enanos tienen ventajas sobre los árboles frutales de tamaño normal. Tienen un sistema de raíces más pequeño, lo que significa que no necesitan trasplantes frecuentes en macetas más grandes y no necesitan poda a menos que se quiera mantener una forma específica.
Una gran ventaja de los árboles frutales enanos es que, a cambio de unos cuidados mínimos, a partir del tercer año podemos obtener frutos de casi cualquier variedad. Esto los hace ideales para aquellos que desean cultivar frutas en espacios reducidos y obtener una cosecha abundante sin la necesidad de trasplantar o podar frecuentemente.
A continuación, se presentan algunos frutales que se pueden cultivar en tiestos, junto con algunas recomendaciones para cuidar el árbol y asegurarse de que dé frutos:
Manzanas: los árboles frutales enanos de manzana son excelentes para cultivar en tiestos. Necesitan un suelo bien drenado y un lugar soleado para crecer. Es importante asegurarse de que el árbol esté bien regado y fertilizado para que produzca una cosecha abundante.
Naranjas: los árboles frutales enanos de naranja son otra excelente opción para cultivar en tiestos. Necesitan un lugar soleado y un suelo bien drenado. Es importante mantener el árbol bien regado y fertilizado para obtener frutos sabrosos.
Limones: los árboles frutales enanos de limón son ideales para cultivar en tiestos debido a su tamaño compacto. Necesitan un lugar soleado y un suelo bien drenado. Es importante mantener el árbol bien regado y fertilizado para obtener frutos sabrosos.
Cerezas: los árboles frutales enanos de cereza son otra excelente opción para cultivar en tiestos. Necesitan un lugar soleado y un suelo bien drenado. Es importante asegurarse de que el árbol esté bien regado y fertilizado para producir una cosecha abundante.
En general, los árboles frutales enanos son una excelente opción para aquellos que buscan cultivar frutas en espacios pequeños. Con unos cuidados mínimos, estos árboles pueden producir una cosecha abundante de frutas sabrosas.
Siete frutales y sus necesidades:
PERAL (Pyruscommunis)
El Peral (Pyrus communis) es una especie típica de los climas templados y templados boreales. Su cultivo es ideal durante la primavera y el verano frescos y soleados, sin la necesidad de sufrir temperaturas extremas. Esta especie florece a principios de abril y sus frutos maduran en septiembre.
Fertilizantes: A finales del invierno, es suficiente realizar un aporte de nitrógeno, fósforo y potasio al Peral. En algunos casos, para un óptimo desarrollo de la fruta, puede ser necesario agregar nitrato de potasio a fines de junio.
Sustrato: El Peral no es sensible al encharcamiento, pero se desarrolla mejor en sustratos permeables. Es importante mantener el pH entre 6,5 y 7 para asegurar un buen crecimiento de la planta.
Riego: El Peral necesita mucha agua, especialmente durante los meses más calurosos del verano. Por lo tanto, es importante mantener un buen sistema de riego para asegurar que la planta se mantenga hidratada en todo momento.
MANZANO (Malus domestica)
El manzano es un árbol frutal que se adapta muy bien a las regiones templadas y frías, al igual que el peral. Para que crezca saludablemente, es importante que los inviernos sean frescos sin heladas tardías, y que la primavera y el verano sean soleados pero no muy calurosos. La floración del manzano se produce a mediados de abril y el fruto madura en agosto o septiembre.
- Fertilizantes: Para que el manzano tenga un crecimiento vigoroso y produzca frutos de calidad, se debe proporcionar un aporte adecuado de nitrógeno, fósforo y potasio. Es recomendable aplicar la mitad del abono antes de la floración y la otra mitad durante la maduración del fruto.
- Sustrato: El manzano no es una planta muy exigente en cuanto al sustrato, pero prefiere un suelo rico en materia orgánica y arcilla. El pH óptimo para su desarrollo se encuentra alrededor de 7.
- Riego: Durante los primeros años, el manzano requiere de un riego regular para asegurar su crecimiento y desarrollo. A partir del tercer año, se puede disminuir la cantidad de riego y hacerlo de forma más espaciada.
- Poda: La poda es una práctica esencial para mantener el árbol saludable y con una buena producción de frutos. Se recomienda realizar una poda de formación durante los primeros años y una poda de mantenimiento cada año para eliminar ramas muertas o enfermas.
CIRUELO (Prunus domestica)
El ciruelo (Prunus domestica) es una planta que se adapta bien a los climas templados y templados cálidos, con preferencia por los inviernos fríos y los veranos calurosos sin heladas nocturnas. Esta planta florece a finales de marzo y produce frutos maduros en julio.
Para asegurar el crecimiento saludable del ciruelo, es importante proporcionar un aporte adecuado de nutrientes. Se recomienda fertilizar la planta con una mezcla balanceada de nitrógeno, fósforo y potasio, aplicando la mitad antes de la floración y la otra mitad en primavera.
El ciruelo no es una planta sensible al encharcamiento, pero se desarrolla mejor en sustratos permeables. Es importante mantener un pH del suelo entre 6,2 y 6,8 para asegurar un crecimiento saludable.
NECTARINO (Prunuspersica var. Nectarina)
El nectarino es una variedad de melocotonero que se adapta bien a todo tipo de zonas. Es una fruta dulce y jugosa que se disfruta en el verano cuando los frutos maduran. A continuación, te presentamos algunos consejos para su cuidado:
- Abonado: Es importante proporcionar una alimentación adecuada para asegurar que el nectarino se desarrolle correctamente. El aporte de nitrógeno y fósforo es suficiente. Se recomienda aplicar el fertilizante al final del invierno, antes de que comience la temporada de crecimiento.
- Sustrato: El nectarino no es sensible a los encharcamientos, pero se desarrolla mejor en un sustrato permeable. El pH del suelo debe ser neutro, alrededor de 7, para asegurar que la planta tenga acceso a todos los nutrientes necesarios.
Riego: Durante la fase de engorde de la fruta, es necesario regar el nectarino con frecuencia para mantener el suelo húmedo. A medida que se acerca la maduración de la fruta, se debe reducir el riego para evitar que se agriete o se pudra antes de la cosecha.
MELOCOTONERO (Prunuspersica)
El melocotonero (Prunus persica) es un árbol frutal perfecto para cualquier región debido a su alta resistencia y adaptabilidad. La floración de este árbol se produce a finales de marzo y la maduración de sus frutos se da en julio y agosto.
- Fertilización: Es importante proporcionar al melocotonero un suministro de fertilizantes al final de cada invierno, que contengan nitrógeno, potasio y fósforo. Esto ayudará a que el árbol se desarrolle adecuadamente y produzca frutos saludables.
Sustrato: El melocotonero no es muy exigente en cuanto al sustrato, sin embargo, es sensible a la asfixia radicular. Es recomendable plantar el árbol en un suelo bien drenado y no compacto, lo que le permitirá un buen crecimiento.
Riego: El riego del melocotonero debe continuarse a los pocos meses del engorde del fruto. Es importante no regar en exceso ya que esto puede afectar negativamente la calidad de los frutos y el crecimiento del árbol.
ALBARICOQUERO (Prunusarmeniaca)
El albaricoquero (Prunus armeniaca) es una especie que se desarrolla mejor en regiones templadas y templadas cálidas. Es un árbol frutal que florece a mediados de marzo y cuyo fruto madura en junio o julio. En este artículo, te proporcionaremos información útil sobre el cultivo del albaricoquero para que puedas disfrutar de sus deliciosos frutos.
Abonado: Para mantener el albaricoquero en buenas condiciones, es suficiente con aportar una dosis anual de NPK (nitrógeno, fósforo y potasio) al final del invierno. En caso de una cosecha abundante, podría ser necesario aplicar un aporte adicional de nitrato potásico a finales de mayo para que los frutos alcancen un desarrollo óptimo.
Sustrato: Es preferible que el sustrato del albaricoquero sea permeable, ya que es sensible a los encharcamientos. Además, se recomienda mantener el suelo libre de malas hierbas y hojas caídas, ya que pueden retener la humedad y aumentar el riesgo de enfermedades fúngicas.
Poda: La poda es importante para mantener el albaricoquero en buenas condiciones. Se recomienda realizar una poda anual de formación en invierno para dar forma al árbol y eliminar las ramas muertas o enfermas. Además, es importante no podar en primavera o verano, ya que esto puede provocar la pérdida de la cosecha.
CEREZO (Prunusavium)
El cerezo, también conocido como Prunus avium, es un árbol frutal de hoja caduca originario de Europa y Asia Occidental. Este árbol es conocido por su fruto dulce y jugoso, que se utiliza en una variedad de recetas, desde tartas hasta mermeladas. En este artículo, hablaremos sobre las características y cuidados del cerezo.
Fertilizante: Para un buen crecimiento y desarrollo del cerezo, es recomendable usar un abono NPK tipo 10-10-15 + 2 Mg. Se debe aplicar la mitad del abono antes de la floración y la otra mitad durante el engorde del fruto.
Sustrato: El cerezo prefiere un sustrato con alto contenido de calcio y buena permeabilidad. Es importante asegurarse de que el suelo esté bien drenado para evitar que el agua se acumule en las raíces del árbol.
Poda: La poda es esencial para mantener la forma y salud del cerezo. Se recomienda podar el árbol en invierno, antes de la floración. Es importante eliminar cualquier rama muerta o dañada para promover el crecimiento de nuevas ramas saludables.
Recomendaciones:
- Mantenga el tronco limpio y elimine todas las malezas.
- Evitar la formación de una costra en el suelo (aflojar con cuidado el suelo).
- Mantillo.
